Cómo hacerlo:
- aceite vegetal (aceite de oliva, por ejemplo)
- sosa caustica. Mucho ojo con la sosa caustica, es corrosiva y no debe entrar en contacto con la piel.
- guantes para proteger las manos
- agua
- un recipiente de plástico (barreño por ejemplo)
- un palo, que utilizaremos para remover la mezcla.
- molde (podría valer un barreño más bajo)
- colorante y esencia para aromatizar
Las proporciones de la mezcla serán para la elaboración del jabón son: 3 litros de aceite, 3 litros de agua y medio kilo de sosa caustica. Vertimos el aceite en el recipiente y acto seguido la sosa caustica, con mucho cuidado. A continuación añadimos poco a poco el agua, el colorante y la esencia. Removemos la mezcla con el palo siempre en el mismo sentido a una velocidad moderada, hasta que la mezcla se haga más espesa y la traspasamos al molde.
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